La Misión de Apoyo al Proceso de Paz en Colombia de la Organización de los Estados Americanos (MAPP/OEA) considera que la instalación del Comité de Seguimiento da vida a la implementación del Acuerdo Humanitario en el Chocó, al tiempo que constituye un paso concreto para avanzar hacia la construcción conjunta de una paz completa en el departamento.
El Comité está conformado por representantes de las distintas subregiones y expresiones poblacionales presentes en el territorio, con miras a verificar la puesta en marcha de la propuesta. “Vamos a ayudar a construir la paz, como nuestras comunidades indígenas, negras y mestizas la necesitan” señaló Dora Sepúlveda, representante de la Mesa Departamental de los Pueblos Indígenas del Chocó.
Roberto Menéndez, Jefe de MAPP/OEA, señaló que la formulación de la propuesta, así como la conformación de un comité de la sociedad civil para verificarla y operativizarla, son un ejercicio de participación social que contribuye a generar alivios humanitarios frente a la situación de violencia que enfrenta el departamento.
Menéndez añadió que “esta participación activa también contribuye a dinamizar el proceso de diálogo y los acuerdos alcanzados entre el gobierno Nacional y la guerrilla del ELN, al tiempo que constituye una vía para iniciar las transformaciones en las regiones, fortalecer la democracia local y contribuir a la garantía de los derechos humanos”.
A su vez, el Obispo de Quibdó, Monseñor Juan Carlos Barreto, referente a este mecanismo comentó que “aquí se ha visto una sociedad activa y participativa, con independencia y capacidad de hablar con las partes de la Mesa en Quitó”.
Al acto de instalación asisitieron líderes y líderesas de organizaciones del departamento, así como Carlos Alberto Palacios, gobernador del Chocó; Juan Mayr, delegado del Gobierno ante la Mesa de Quito; Juan Carlos Cuellar, gestor de paz del ELN; Gerard Gómez, Jefe de OCHA; Jorguen Persson, delegado especial de Suecia para el proceso de paz; Anika Otterstedt, Jefe de Cooperación de la Embajada de Suecia, y representantes de las Diósesis de Quibdó e Istmina y Tadó.
Junto con la iglesia católica y otros organismos como Naciones Unidas, MAPP/OEA ha venido acompañando a las organizaciones sociales y étnico-territoriales del Chocó en la formulación y presentación de la propuesta, con el apoyo de Suecia.
